Hace aproximadamente 44 meses Nayib Bukele asumió como presidente de El Salvador, un país centroamericano manchado por la guerra entre pandillas desde hace años. De entrada, no obstante, su gobierno se ha enfocado en intentar reestablecer el orden.
Aunque criticado por muchos, pero alabado por otros, Nayib Bukele ha puesto tras las rejas a más de 60.000 presuntos pandilleros. Además de eso, está poniendo en marcha la recuperación de los espacios que han estado bajo el control de las pandillas para generar espacios de desarrollo.
El mandatario anunció por su cuenta de Twitter que su estrategia ha empezado a dar frutos, ya que se registran 300 días sin homicidios, algo que los gobiernos anteriores no estuvieron ni cerca de lograr.