Ayer en Bucaramanga, hacia las 4 de la tarde, se registró una explosión en una vivienda donde estaban 3 niños, de lo cuales uno, que contaba con 11 años, murió en el hospital. Con respecto a los otros dos, se sabe que son niñas de 13 y 15 años.
Al principio se pensó que la explosión había ocurrido a raíz de una pipeta de gas, pero se descartó. Las autoridades respectivas, en este caso, la Unidad Investigativa de Antiexplosivos intenta averiguar la causa.